Tu cuerpo volaba entre sueños,
sueños perpetuos de deseos
que al sentir el aroma de mi esencia
dibujaron a tu lado mi silueta desnuda.
Te volviste humedad
en noche cálida de primavera
y fuiste el susurro que cruzó la distancia
para ser la piel cercana
que vibra al ser acariciada.
Dulce